Señor director:
En el Chile actual los profesionales que sacan su título en pedagogía están siendo desvalorizados. Un docente puede ejercer clases en universidades y colegios sin siquiera haber realizado sus estudios como pedagogo (en la actualidad existen más de 10.000 docentes) siendo el mineduc quien declara que “la autorización docente tiene una duración tope de 5 años, con el fin de que la persona valide sus estudios”. Ahora bien, estos 5 años equivalen a: una carrera universitaria promedio, en donde los futuros egresados contarán con unas bases mediocres de educación; y a casi la mitad de la enseñanza escolar completa, dejando escolares y futuros universitarios, nuevamente, con una base educacional de baja eficiencia.
¿Cómo es posible que alguien que pasó aproximadamente 5 años de su vida esforzándose por obtener el título de profesor, sea opacado por otra persona que tiene como única obligación contar con un título profesional de la materia solicitada?
Estamos hablando de maestros, los cuales son la base de la sociedad, sin ellos no sería posible alcanzar un Chile fuerte, sustentable y culto. Reitero, los profesores son importantes, no se les puede reemplazar por cualquier profesional, por muy prestigiosa que sea su área. Anteponemos la calidad antes que la mediocridad.
Matías Opazo
Estudiante de IV medio