La DC desde su creación se ha declarado un partido revolucionario y la eterna lucha entre los militantes que no aceptan al marxismo y aquellos que conviven con el partido comunista, ambos bloques han partido a la DC en dos almas, situación que quedó demostrado en esta última elección. Un ala oligárquica que defiende el neoliberalismo y un ala progresista en la cual yo me encuentro.
Si hacemos un análisis de la calidad de los votos, estos se diferencian en que la lista 1 por fin logró juntar a pequeños grupos que por su esencia no dejan crecer líderes.
Respecto a la lista 2, hasta el momento sigue en luna de miel y pienso que en Maipú es sólo gracias a Alejandra, a quien reconozco una buena líder y un buen proyecto…. político personal.
La generación actual, es una generación que conoció la última etapa de Pinochet y por lo tanto gozaron del poder de la Concertación, estudiaron, lograron buenos trabajos, pero lamentablemente no aprendieron la política y menos el espíritu que imprime la falange. Muchos de esta generación crecieron con grandes egos y como todos sabemos, los árboles no dejan ver el bosque; por ello, el desafío futuro en Maipú, es aunar esfuerzos para hacer una lista de consenso que permita trabajar con dos grandes pilares: capacitar a la generación de recambio, de modo que entiendan los grandes temas que irá colocando el gobierno en este nuevo escenario político: desigualdad, educación, recursos naturales, medio ambiente, agua, temas que a mi juicio todo DC debe comenzar a dominar.
Un segundo tema es la búsqueda de jóvenes en las iglesias y colegios que se interesen en estos temas y deseen integrase a este sector político para defender colectivamente estas demandas de la sociedad, rejuvenecida con los milenian
Nos irá bien, tengo mucha confianza que, recuperando nuestras raíces y valores, recuperando la fraternidad y respeto por las ideas, practicando la democracia interna, la DC comenzará su proceso de recuperación política ya que, gracias a Dios, dejamos de ser una bolsa de trabajo.
¡Volverán los nuevos tiempos y será hermoso!